Barbecho

TRAS LAS RUPTURA

BARBECHO

Hay un tiempo para sembrar y un tiempo para recoger. Tras la ruptura, tenemos que cuidar nuestro territorio, nuestro interior, para dejar sitio a la nuevo. Debemos descansar para que la tierra se regenere. Son momentos para amar las preguntas sin buscar respuestas que aún no estamos preparados para vivir. Son momentos en que aprendemos a vivir en la incertidumbre. Nos mantenemos donde preferiríamos no estar, y al hacerlo y estar en paz con ello, nos expandimos de maneras asombrosas. La impaciencia pide lo imposible, porque quiere alcanzar el objetivo sin los medios para poder llegar ahí. Tras la ruptura, abracemos un periodo de barbecho. Los frutos poco a poco irán llegando (Inspirada por Rielke, Hegel y Sara Lewis)