BlogEl pulso del sentir

La metamorfosis

Un aire, un aire, un aire,

un aire,

un aire nuevo:

no para

respirarlo

sino para

vivirlo.

(Gonzalo rojas, «La palabra») (1)

A lo largo del amor, mudamos varias veces de piel, anticipamos vidas que están por venir. Tenemos tanto que aprender, tantas formas que vestir… Hasta la tristeza nos sirve, como la crisálida que cobija a la mariposa, y que aún conserva huellas de la larva que está dejando de ser.

Del germen del encuentro surge el hábito de amarnos. Podemos no llegar a ser, olvidar lo que somos, recordar o dejar de ser. El amor es testigo de muchos cambios de piel, y será cómplice de lo venidero, si le dejamos hacer. Como la hoja que acoge el huevo, sirve de alimento a la oruga y envuelve a la crisálida, el amor nos arropa antes, durante y después de los acontecimientos.

Pero abandonamos su lenguaje.

La poesía, asegura Gonzalo de Rojas, te da la palabra que no mereces, y te pones a balbucear el mundo (2). El amor es un poder que nos ampara y nos regala la voz que necesitamos para forjar nuestro destino. Aunque nos olvidemos de él, siempre está ahí. Como la hoja, custodia la ley secreta que necesitamos descifrar.

María Teresa Rodríguez de Castro

(dedicado a mis hermanas Marta, Ali y Lucía)

NOTAS:

(1) Rojas, Gonzalo. “Metamorfosis de lo mismo. Poesía completa”. Visor Libros, Madrid, 2003

(2) Discurso de Gonzalo Rojas al recibir el premio Cervantes

Composición: “Metamorfosis”, Marta Rodríguez de Castro @martardecastro